Si bien para los amantes del yogurt de pajaritos y los que ya se consideran expertos en su cultivo y cuidado, siempre cabe la duda del tamaño de los nódulos de kefir.
A continuación algunos datos importantes que deben saber y que nosotros sin duda los hemos tomado en cuenta a través de la propia experiencia. Quizás haya personas que les resulte de otra manera, sin embargo esta es nuestra experiencia...
En primer lugar según nuestra experiencia con nódulos de kefir, hemos podido precisar que el tamaño no es lo que importa, sino la cantidad de nódulos que tengas. Muchas personas se esmeran buscando los nódulos más grandes (que por cierto cuesta trabajo encontrar) pensando que estos son mejor que los pequeños, sin embargo es lo mismo. Lo importante es que si quieres una producción de yogurt natural de calidad debes tener hartos nodulos y fijarte cuánta leche colocas. Si tienes una fuente repleta de nódulos pequeñitos va a elaborar mucha más producción y de mayor calidad que un frasco chiquito con solo unos cuantos kefir grandotes.
Por esto hay que tener en cuenta, a mayor cantidad de nódulos, mayor producción y yogurt más espeso. El tamaño del nódulo no es lo relevante si quieres un rico yogurt. Es más a través del tiempo a experiencia propia hemos podido resaltar que los nódulos pequeños generan una producción mucho más suave y menos ácida de yogurt que los más grandotes.
Si quieres que tus kefir se multipliquen de manera más rápida no dudes en alimentarlos siempre con leche entera, ya que la semi descremada tiene muy bajo porcentaje de grasa, proteína animal y lactosa. Los nódulos de kefir se alimentan de esto y si los dejamos de alimentar se debilitarían hasta morir.
SALUDOS! =)
